Rivista DMA

Facilidad y creatividad

Facilidad y creatividad María Dominica Mazzarello, de la que celebramos los 125 años de la muerte, es la mujer fuerte que ha tenido en don de la naturaleza un carácter determinado, volitivo, tenaz. Las dificultades no han sido para ella una cautela o un impedimento para ir más allá. Más bien han provocado la reacción contraria; ante el imprevisto y también en el revés sus energías interiores se han multiplicado hasta conducirla a metas inesperadas, inéditas, creativas. ¡En 44 años de vida!
Ciertamente de Don Bosco no se puede decir que tuvo una existencia lineal, ni siquiera fácil. Su vida fue más un recorrido de obstáculos que un camino en un sendero llano. Conocemos su historia, sembrada, desde los primerísimos años, de dificultades, incomprensiones, amargas sorpresas. Quizás no tendríamos el genio de la educación, ni el padre de muchos jóvenes pobres, ni el fundador de una gran familia religiosa y de obras extraordinarias, si no hubiera hecho experiencia de aquella parte de dureza de la vida que a menudo acompaña muchas vicisitudes humanas.
Frère Roger Schultz en 1940, a los 25 años, estaba buscando una casa en donde acoger a quien necesitaba un refugio a causa de la guerra y donde un día habría una comunidad. En la búsqueda dio con una bonita vivienda con una amplia granja, en Frangy, en la Savoya. Las condiciones de adquisición eran ventajosas. Lo pensó largamente. A continuación anotó; “Aquel lugar me pareció demasiado cómodo. Un pensamiento tenía arraigado en mí; muy a menudo la facilidad no lleva a la creatividad”. Después de algunos días descubrió una pequeña aldea, muy pobre, privada de toda estructura, junto a una iglesita románica. Se llamaba Taizé. Intuyó que aquel era el lugar en el que permanecer y decidió, contra el consejo de muchos. Todos conocemos lo que es hoy Taizé.
Nosotras FMA queremos ser mujeres de Evangelio y seguir recorriendo los senderos de Jesús de Nazaret, de María, la madre que compartió profundamente su continuo peregrinar. Los senderos recorridos por nuestros santos.
Estamos llamadas a seguir más de cerca al Maestro, viviendo con radicalidad las bienaventuranzas del Reino (Const. 10). En ningún tiempo, y hoy aún menos, éste es un camino fácil. La coherencia hacia el don recibido nos pone a menudo a hacer opciones de valentía que nos colocan contracorriente, en situaciones de minoría y de soledad.
Se trata de afrontar un reto muy difundido respecto a un ídolo que fascina sobre todo a los jóvenes y que lo describe bien un profesor-escritor, Marco Lodoli: “Desde hace demasiado tiempo vivimos bajo el influjo de una divinidad tan fascinante cuanto cruel, un pajarito que canta suave, pero que tiene un pico tan sutil y feroz que nos come el cerebro. La Facilidad es la idea que devora nuestros pensamientos, y como consecuencia nuestra vida entera”.
Los recientes documentos de la Iglesia orientan en particular a los consagrados a ofrecer hoy el testimonio de una vida densa de transparencia evangélica; de existencia sobria y precaria en una sociedad que ha perdido los horizontes y la medida de la posesión, de fraternidad evangélica en un mundo deteriorado por la violencia; de servicio de la caridad hacia todos los necesitados de afecto y brazos solidarios; de empuje misionero que destruya el fetiche de la propia supervivencia según estándares orgullosos del pasado.
Sabemos por experiencia que los jóvenes quedan fascinados por este tipo de testimonio.
Es el don que nosotras podemos hacerles.
Giuseppina Teruggi

OK Su questo sito NON utilizziamo cookie di profilazione, ma solo cookie tecnici e/o per il monitoraggio degli accessi. Se vuoi saperne di più clicca qui. Cliccando sul pulsante OK presti il consenso all'uso di tutti i cookie.