Proviene de una familia residente en Massaranduba (Santa Catarina – Brasil), donde nace el 25 de abril de 1950. Desde niña, frecuenta el Instituto Nuestra Señora Auxiliadora de Rio do Sul (Santa Catarina) y allí realiza sus estudios.
Emitidos los votos religiosos, consigue la Licenciatura de Pedagogía en de la Pontificia Universidad Católica de Porto Alegre. Completa los estudios frecuentando, en los años 1985-1987, el Curso de Espiritualidad en la Pontificia Facultad de Ciencias de la Educación Auxilium (Roma).
Tiene en su activo una larga experiencia de animación como Docente, Directora, Secretaria y Consejera Inspectorial, hasta su nombramiento como Inspectora de la provincia N. S. Aparecida de Porto Alegre (1993-1999). En este servicio se muestra particularmente atenta a la vida espiritual de las hermanas, a profundizar la espiritualidad salesiana, a crear comunión entre los miembros de la comunidad educativa, para asegurar la calidad de la misión entre los jóvenes.
Persona optimista, capaz de búsqueda y de diálogo, alegre y respetuosa del misterio del otro, su presencia entre las hermanas, los jóvenes, los niños se destaca siempre por la alegría y la sencillez.
Durante tres años fue Presidenta de la Conferencia Interinspectorial del Brasil, CIB.
Ha desempeñado el cargo de Secretaria ejecutiva de la Conferencia de los Religiosos/as del Brasil (Región Sur).
Como Delegada de la Inspectoría de Porto Alegre para el Capítulo, ha participado en la fase preparatoria del CG XXI, 2002, colaborando con la Comisión pre-capitular. Este mismo Capítulo le ofreció el cargo de Consejera Visitadora. Durante el sexenio ha visitado siete inspectorías de América Latina, dos de Europa y dos de África.
En el CG XXII (2008), sor Alaide manifestó su disponibilidad ante la votación de la asamblea, que la llamó a animar el ámbito para las Misiones ad gentes. "Siguiendo tu ejemplo – respondió a la pregunta de la Madre – pronuncio mi sí para ser discípula y misionera, porque ‘ay de mí si no evangelizo' ".
Su camino de animación del ámbito ha privilegiado las áreas de la animación, de la formación, de la cooperación misionera y de las nuevas fronteras misioneras a menudo haciéndose peregrina en las tierras de misión. En el sexenio ha desarrollado procesos previamente iniciados y ha abierto otros nuevos, relativos especialmente a la sensibilización y a la formación misionera, a la sinergia con los demás Ámbitos y con el Dicasterio SDB.
Durante el Capítulo general XXIII, la asamblea ha confirmado su mandato por un segundo sexenio. Sor Alaide, ante la invitación de la Madre, ha aceptado y ha respondido: "En la fe acepto esta manifestación de la voluntad de Dios. Me pongo en las manos de Dios como instrumento y me comprometo a seguir siendo discípula misionera en el corazón del mundo, en el Instituto."
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